Cuidados de pacientes con el mal de Alzheimer
Cuidar y tratar a una persona con la enfermedad de Alzheimer no es un trabajo fácil. Cuando dicha función implica una persona que amas, la tarea puede ser aún más difícil.
La agresión, rabietas, y las acusaciones por la una con la demencia son de aquellas conductas más dañinas para los cuidadores familiares.
Mientras que un cuidador pagado podría encontrar estos difíciles de tolerar a veces, que no sienten el dolor de ser maltratado por uno que has amado. A medida que la enfermedad progresa, la personalidad de la persona que has conocido y amado puede cambiar drásticamente.
Los mansos, abuelo suave puede deteriorarse en un personaje enojado, gruñón que asusta a los nietos. La tía amante de la diversión y juguetón, puede llegar a ser retraído en su conducta.
La paranoia y alucinaciones son comunes
Dos factores relacionados con el Alzheimer que contribuyen a estos cambios son la paranoia y alucinaciones. Como cuidador de Alzheimer, podrá ser testigo de uno o ambos de estos síntomas.
La paranoia es un síntoma común de la enfermedad de Alzheimer. Cuando nuestro ser querido estaba en las primeras etapas de la enfermedad se convirtió en extremadamente sospechoso de otro miembro de la familia. Ella tenía muchas razones para sospechar, así que nadie prestó mucha atención a sus acusaciones en un primer momento.
El hecho de que ella sospechaba inapropiado de esta otra persona no era la parte más inusual de la historia. Eso había sido parte de su vida diaria durante muchos años. Sin embargo, mantuvo sus sospechas a sí misma o algunos otros en la familia a la que ella era la más cercana.
Ella nunca quiso que nadie más sepa acerca de las partes más privadas de su vida. De repente, todo cambió. Ella ya no trató de mantener sus sentimientos en secreto. Sus sospechas se derramaron a todo el mundo que se encontró. No podía pensar en otra cosa excepto cómo estaba siendo tratado injustamente por la otra persona. Su vida se consume con su odio hacia él.
¿Por qué este cambio en su comportamiento?
Se justificaban sus sospechas? Si bien puede haber habido algo de verdad en sus acusaciones, la mayor parte de sus creencias eran el resultado de la paranoia. Afortunadamente, con el tiempo y la medicación correcta que finalmente se olvidó de la mayor parte de las cosas que la atormentaban por lo que durante ese período de tiempo. Ahora nos damos cuenta de experiencias como ésta pueden ser típicos de la enfermedad de Alzheimer.
Mi tía vivió durante tres años con una encantadora jovencita, a quien quería mucho. Eran maravillosos amigos en la comunidad de vida asistida. El compañero de cuarto, Esther, había perdido a su marido justo antes de que se conviertan en compañeros de cuarto y ella pidió para entrar en la habitación con mi tía.
Un día Esther comenzó a tener alucinaciones. Después, ella estaba convencida de que mi tía estaba coqueteando con su marido. Nada de lo dicho podría convencerla de lo contrario. Creció más paranoico y agitado hacia mi tía cada día y, finalmente, trató de hacerle daño físicamente.
Esther fue trasladado a otra habitación y se sentó en una mesa diferente en su comedor para evitar conflictos. El reajuste de sus medicamentos ayudó Esther finalmente regresar a su antiguo yo, aunque nunca volvió a ser capaces de compartir una habitación con nadie.
Conclusión y recomendación
Cuidadores de Alzheimer deben darse cuenta de que la paranoia y las alucinaciones pueden cambiar el comportamiento de la persona que amas. No hay nada divertido o fácil de esto, pero se trata de una parte de la enfermedad.
Cada cuidador tiene días cuando quieren correr lo más rápido y más lejos posible de la que tiene la enfermedad de Alzheimer. Eso puede sonar terrible decirlo, pero es verdad. Brindando la atención requiere una enorme cantidad de paciencia, tiempo y amor. Recuerde que sufre de Alzheimer ya no puede ser tomando decisiones conscientes.
Ten en cuenta también que la paranoia o alucinaciones pueden estar presentes en algunos de los días más difíciles.
Juan Pablo Segura
Especialista en Salud y Creador de “Revertir el Alzheimer”
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Después de haber recorrido el camino a sí misma, Juan Pablo Segura es un experto en ayudar a los cuidadores de Alzheimer y a los familiares de los pacientes con el mal de Alzheimer, a sobrellevar el estrés emocional, financiera y legal de cuidar a un ser querido con Alzheimer.
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